@MendozayDiaz

@MendozayDiaz

domingo, 9 de junio de 2013

Cambios.

Para lograr buenos cambios se requiere una adecuada dirección de personas. 

Los dirigentes más efectivos son aquellas personas capaces de desarrollar una visión de futuro para la organización y, además, hacerla realidad. 

Formular una visión de futuro en una empresa significa clarificar en dónde queremos estar en cuanto a segmentos de mercado a atender, líneas de productos y servicios, tecnologías, capacidades que nos distinguirán de otros, estilo de personas…También es útil preguntarse “dónde no se quiere estar”. Nos ayuda a clarificar posiciones.

Vivimos en un tiempo donde los cambios sociales, políticos y económicos son frecuentes. 

Los cambios, en muchas organizaciones, son constantes. Unas personas se incorporan, otras se desvinculan, nuevas tecnologías, nuevas leyes, nuevos competidores. 


Quizá uno de los cambios más complejos para una organización sea mantener una estructura de acuerdo a su nivel de actividad económica. Los frecuentes vaivenes suelen traer consigo ajustes en los equipos de personas. Y las personas necesitamos una mínima estabilidad para realizar nuestro trabajo.

Los análisis para llegar a una propuesta incluyen la visión de futuro de la organización, la situación actual, las personas y el presupuesto disponible. 

Es muy recomendable contar con un especialista externo ya que estas modificaciones afectan a la estructura de poder y es complejo trabajar la propuesta con los afectados.

En la práctica, este tipo de decisiones se suelen postergar. 

Y, si estos cambios no se realizan con rapidez, a veces, el remedio es peor que la enfermedad ya que los cambios en proceso agregan más inestabilidad a la situación general de cambios que se vive. 

Casi siempre, en estas situaciones, entre las personas, se genera una gran incertidumbre cuando se esperan cambios pero estos no llegan. 

La incertidumbre se puede convertir en frustración o desánimo si no se gestionan bien las comunicaciones y se da rienda suelta a las filtraciones, chismes, fantasías… 

Postergar las decisiones de cambio suele ser más dañino que realizarlas aceleradamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario